Caren Peresón y Cruz Scardellato Auer dejaron todo atrás para embarcarse en un viaje en bicicleta que unió Alaska y Ushuaia, recorriendo 40 mil kilómetros durante 6 años y medio. Su aventura nos muestra la valentía de perseguir los sueños y la importancia de conectarnos con la naturaleza.
A través de su travesía, Caren y Cruz demostraron que el espíritu de aventura y la pasión por la naturaleza pueden llevarnos a lugares inimaginables, inspirándonos a seguir nuestros propios sueños y cuidar el mundo que nos rodea.
Cruz disfrutando disfrutando de una vista impresionante del cañón del Antílope, en el sudoeste de Estados Unidos
El recorrido desde Alaska hasta Ushuaia es un desafío épico que pocos se atreven a emprender. Sin embargo, Caren Peresón y Cruz Scardellato Auer, dos abogados de Santa Fe, decidieron dejar atrás su vida cotidiana y lanzarse a esta aventura en bicicleta. Su travesía de 40 mil kilómetros a lo largo de 6 años y medio es un ejemplo inspirador de valentía, perseverancia y conexión con la naturaleza.
A lo largo de su viaje, se encontraron con paisajes impresionantes, desafíos físicos y culturas diversas. Su determinación y espíritu de aventura les permitieron superar los obstáculos y disfrutar de experiencias únicas. Desde dormir bajo un cielo estrellado en el cráter de una laguna en Ecuador, hasta acampar junto a un lago rodeado de montañas en Perú, cada día les ofrecía nuevas oportunidades para conectarse con la naturaleza y apreciar la belleza del mundo que nos rodea.
La pareja conectando con la naturaleza al acampar junto a un lago rodeado de montañas durante su viaje.
Más allá de su propia experiencia, el viaje de esta pareja nos invita a reflexionar sobre la importancia de cuidar el medio ambiente. Durante su travesía, fueron testigos de los efectos del cambio climático y la degradación ambiental en diferentes regiones. Esta conciencia los llevó a adoptar prácticas sostenibles, minimizando su huella ecológica y compartiendo mensajes de conservación con las comunidades que encontraban en su camino.
La historia de Caren y Cruz nos inspira a todos a perseguir nuestros sueños, incluso cuando parecen imposibles. Su determinación para dejar atrás la comodidad y la seguridad de sus vidas anteriores demuestra que la verdadera aventura comienza cuando nos atrevemos a dar el primer paso hacia lo desconocido. Nos recuerdan que cada uno de nosotros tiene el potencial de hacer algo extraordinario si nos atrevemos a salir de nuestra zona de confort.